Ingredientes:
200 g mantequilla
150 g harina normal
5 g levadura química (tipo Royal)
5 huevos medianos
160 g azúcar
1 pizca de sal
Ralladura de un limón
Preparar la mantequilla avellanada: fundir la mantequilla a fuego medio-bajo, cuando tome un color dorado apartar del fuego, colarla y pesar 150 g. Reservar hasta que baje a 50º C de temperatura.
Tamizar la harina con la levadura y reservar.
Con el robot de cocina con accesorio de varillas, batir unos 10 segundos los huevos con el azúcar y la pizca de sal. Añadir la mezcla de harina en tres veces con una lengua de cocina (sin batir). Añadir la ralladura de limón. Incorporar la mantequilla de una sola vez cuando esté entre 45 y 50º C. Batir con las varillas para alisar la mezcla y pasar a una manga pastelera (no hace falta boquilla). Rellenar los moldes (previamente engrasados) con unos 17 g por concha.
Hornear en la parte inferior del horno a 180º C durante 8 - 10 minutos, sacar y desmoldar inmediatamente, dando un golpe en la encimera con el molde: se irán soltando solas.
Trucos / consejos / comentarios:
Con estos ingredientes salen aproximadamente 40 madeleines. Si se hornean a 170º C con aire le sale más barriga a la magdalena.
A Julián le gustan tanto que las prepara a menudo para tener siempre en casa. Las guardamos en un bote hermético para que se mantengan esponjosas. A él le gusta mojarlas en el café, yo me las como con onzas de chocolate o bien untándole Nutella. Sea como sea, están riquísimas :-)
A Julián le gustan tanto que las prepara a menudo para tener siempre en casa. Las guardamos en un bote hermético para que se mantengan esponjosas. A él le gusta mojarlas en el café, yo me las como con onzas de chocolate o bien untándole Nutella. Sea como sea, están riquísimas :-)






















