¿Recordáis las fantásticas cartulinas que compré por internet de USA? Entre ellas estaban estas. Desde el momento en que las vi, quise convertirlas en galleta (¿galletizarlas? sí... eso). Adoro los robots infantiles y los colores de este diseño eran preciosos. Y aunque me ha costado más de lo que esperaba encontrar el momento de hacerlas ¡aquí están!
Excepto el cohete, cuyo cortapastas compré en Nueva York (¡en NY Cake Supplies!!), el resto están hechas con plantilla: escaneé la cartulina, recorté las figuras que quería en el ordenador (nave espacial, planeta y cabeza de robot), las pegué en Word al tamaño que quería que tuvieran las galletas, imprimí en una cartulina especial para impresora y las recorté. Luego hay que (armarse de paciencia y) ponerlas sobre la masa e ir recortando con un cuchillo pequeño siguiendo el contorno.
Estoy feliz no sólo con el resultado sino porque no sabía cómo hacer con las antenitas del robot, ya que si la galleta tiene tramos finos acaban rompiéndose... así que tras darle muchas vueltas probé a poner fideos recortados sobre la galleta nada más dar el glaseado azul, colocando un lápiz debajo de la parte que sobresale de los fideos para que se mantuvieran en esa posición hasta que el glaseado se secara totalmente. Luego los pinté con glaseado por delante y les puse en el extremo un sprinkle ¡me encanta cómo ha quedado!
Además, como podéis ver, utilicé purpurina no tóxica de Rainbow Dust. Eso sí, acabé llena de purpurina de pies a cabeza, cuando llegó Julián me dijo que seguro que al acostarnos se me veía en la oscuridad :-D