Bizcocho:
120 ml cerveza negra (yo he usado Mahou)
125 g mantequilla
25 g cacao en polvo Valor
140 g harina Gallo normal (no de repostería sino normal)
150 g azúcar normal
0,75 cucharadita de bicarbonato sódico
Una pizca de cucharadita de sal
1 huevo XL
90 ml de nata con unas gotas de limón (dejar reposar un rato para que se corte)
Cobertura:
175 g mantequilla a temperatura ambiente
150 g icing sugar
175 g chocolate Valor en gotas 70%
2 cucharadas de pasta de mango HomeChef
Bizcocho:
Preparar una bandeja con cápsulas para magdalenas (yo uso cápsulas del nº 9). En un cazo a fuego lento llevar a ebullición la mantequilla y la cerveza. Cuando empiece a hervir, retirar del fuego y añadir el cacao en polvo. Batir hasta que esté totalmente disuelto y sin grumos. Dejar enfriar unos 15 minutos o hasta que esté a temperatura ambiente.
Precalentar el horno a 170 ºC.
Tamizar la harina junto con el bicarbonato y la sal.
Batir los huevos, el azúcar y la nata hasta que estén totalmente integrados.
Añadir la mezcla del chocolate a la mezcla de los huevos y batir hasta que tenga un color uniforme. En dos veces incorporar la mezcla de harina. Batir lo mínimo necesario, suavemente. Pasar a las cápsulas y hornear unos 25 minutos. Dejar enfriar en una rejilla. Deben haberse enfriado totalmente antes de ponerles la cobertura, o esta se fundirá.
Cobertura:
Fundir el chocolate en el microondas a media potencia, con 1 ó 2 minutos será suficiente (terminará de fundirse del todo removiéndolo con una cuchara). Batir la mantequilla con el icing sugar (con palas planas o mariposa) hasta que esté bien esponjoso. Añadir el chocolate tibio (no recién salido del microondas o nos fundirá la mantequilla) vertiéndolo poco a poco mientras batimos. Añadir la pasta de mango y batir de nuevo hasta que esté bien mezclado. Mejor comerla recién hecha y cremosita, porque cuando pasa el tiempo se endurece un poco debido al chocolate (queda como si fuera trufa).
Trucos / consejos / comentarios:
Tremendos, riquísimos, deliciosos... todo lo que os diga es poco. Mañana mis compañeros de oficina van a dar palmas con las orejas cuando los prueben, jajaja. "Doy salida" a todo lo que horneo llevándolo al trabajo o a las reuniones familiares, porque como se queden en casa me lo como yo todo... y, chicas, las calorías hay que compartirlas. Ahora todos mis compañeros están, como yo, con la operación "traje de buzo" por mi culpa. Pero qué felices les tengo, jeje.