Lo prometido es deuda ¡aquí está el
tutorial del uso del aerógrafo en galletas!
Tengo que decir que decorar galletas con aerógrafo ha sido más difícil de lo que creía. Utilizar el aerógrafo es súper sencillo, pero que las galletas queden bien es más complicado. A continuación os cuento todo: qué se necesita, cómo funciona y los trucos que he utilizado para conseguir que las galletas me quedaran bonitas:
¿Qué se necesita?
1)
Colorantes alimentarios para aerógrafo: Compré un kit de 12 colores para aerógrafo de marca Copycake. Me han dicho que se pueden usar los colorantes alimentarios normales diluidos en un alcohol tipo vodka; y también los colorantes alimentarios en polvo (como los de Rainbow Dust) igualmente diluidos en alcohol tipo vodka. En España por ejemplo
María Lunarillos vende los colores sueltos.
2)
Un aerógrafo que incluya compresor y manguera. El mío lo compré en Reino Unido así que necesité un adaptador para el enchufe del aerógrafo (3). Son muy baratos y los venden en cualquier sitio (por ejemplo en Leroy Merlín).
4)
Esténciles.
5) Imanes: para inmovilizar el esténcil cuando se aerografía la galleta. Los compré en un chino. Los de debajo tienen que tener la misma altura que la galleta glaseada. Si ya tienen el mismo grosor que la galleta, perfecto; si no: se pueden poner varios acumulados o se les puede pegar algo para darles altura.
¿Cómo funciona?
Es súper sencillo, y lo digo yo que jamás me leo las instrucciones de nada (me falta voluntad para ello...):
1) Se pone tinta en el pequeño depósito que tiene la pistola. Lo más cómodo es hacerlo teniendo la pistola encajada en el compresor para tener libres las dos manos.
2) Se pone en marcha el compresor (en el único botón que tiene)
3) Se aprieta el "gatillo" de la pistola.
Se puede graduar la apertura de la pistola, para que salga más o menos cantidad de tinta, en su parte trasera, girando la rosca hacia uno u otro lado.
Para cambiar de color: hay que vaciar el depósito (yo lo vacío en el propio bote de colorante), lavarlo con agua y secar bien. Se pone el nuevo color y se aerografía sobre una hoja de papel hasta que deje de salir el color anterior y salga el nuevo.
Para guardarlo: se vacía el depósito de colorante, se le pone agua y se aerografía (sobre el lavabo por ejemplo) hasta que el agua salga limpia. Se seca y a guardarlo.
Trucos para que quede bien
El mayor problema que tuve fueron los "churretones". Descubrí que lo mejor era:
1) Graduar la apertura de la pistola de forma que saliera poca tinta.
2) No acercar demasiado la pistola a la galleta, para que el color quedara lo más uniforme posible.
3) Limpiar, siempre, el esténcil entre una galleta y otra, porque la tinta que se acumula encima (el esténcil es de plástico) acaba goteando sobre la galleta. Simplemente lo limpiaba con una servilleta que empapaba la tinta acumulada.
4) Empezar aerografiando sobre una hoja de papel porque a menudo el primer "disparo" sale con churretón. Una vez se "estabiliza" el disparo lo muevo hacia la galleta.
Otra cosa importante es cubrir toda la superficie de trabajo para protegerla, porque si no se acaba manchando por mucho cuidado que uno ponga (snif) y estos colorantes no salen fácilmente.
La tinta seca muy rápido: al momento ya se puede tocar la galleta tranquilamente.